martes, 30 de septiembre de 2014

Love Bye Love Cap 9 FINAL

-¿Estas ya más tranquilo?- Susu le ofreció un poco de té, pero Jaejoong no decía demasiado. -¿sabes que cuando ambos discutían gritaban mucho?- bromeó un poco intentando arrancarle una sonrisa, pero por la cara de Jae, era mejor no hacer bromas. –Jaejoong ah.. yo también creo que deberías dejar ese trabajo e intentar hacer realidad tu sueño.- se sentó a su lado, y ante esas palabras, él le miró sorprendido.

-¿Qué sabes tú de mi trabajo?- preguntó asustado, ¿es que Yoochunnie le había contado?

-Bueno.. Hace tiempo que Yunho y yo sabemos a lo que te dedicas.. - lo dijo en voz baja temiendo haber metido la pata. 

-¿Así que a eso se dedica? ¿A cuéntame sobre mi vida?- preguntó con cierta ironía.. Pero por un momento se sintió avergonzado ante su vecino.

-¡No! ¡Jaejoong no es eso! él está preocupado, solo eso.. Chunnie está enamorado de ti, así que quiere lo mejor para ti..-

-¡Él no puede saber que es lo mejor para mí! no puede pretender... que haga lo que a él le gustaría que hiciera! ¿Qué pasa con él?- no lo entendía, y todo se volvía cada vez  más complicado..

-Jaejoong ah.. ¿De verdad eres feliz con ese trabajo?- Jae le miró, y simplemente no pudo responder. -creo que eres una persona muy valiente ¿sabes? pero ahora no creo que lo estés siendo.. Tienes miedo de ti mismo ¿no? de tus sentimientos hacia Chunnie..- 

-No lo tengo.- le replicó actuando a la defensiva, realmente Junsu tenía razón.. Él no era así, siempre se había considerado una persona fuerte, valiente.. Pero todo era por Yoochun.

-Está bien, entonces cálmate, tomate tu tiempo y piensa bien las cosas..- le sonrió revolviendo el cabello del mayor. -no tiene nada de malo.. Que te hayas enamorado de él..- 

-Hace mucho... que no tengo  a alguien al lado que se preocupe por mi.- le confesó bajando la mirada, recordando a sus padres..  

-Pero Chun lo está haciendo.. Incluso Yunho y yo lo hacemos... piénsalo Jaejoongie.. Todo el mundo merece una segunda oportunidad, también tú..- le dijo finalmente con una sonrisa, y ante esas palabras, Jae le miró sintiendo como su cuerpo se estremecía.
A la mañana siguiente, Junsu se levantó para ir a tomar una ducha y preparar el desayuno. Tras ducharse y vestirse salió de la habitación sin hacer demasiado ruido.. Y aunque por un momento pensó que Jaejoong ya debía haberse ido a casa, este seguía dormido en su sofá.

Sonrió suavemente al verle allí; Jae había pasado la noche en su casa tras dormirse en el sofá después de ver una película y beber un poco. No podía evitar tener cierto sentimiento de protección hacia ese chico, después de todo, le había tomado cariño como si se tratara de su hermano mayor.

-Duerme un poquito más.- acarició levemente el cabello platino del joven, le tapó un poco más, y fue a la cocina a preparar café.

Al poco rato tuvo el desayuno listo.. Café recién hecho y tostadas con mermelada; un desayuno bastante occidental pero rápido de preparar después de todo. Era hora de despertar a Jaejoong, pero entonces tocaron a la puerta.

-¿Quién será?- le extrañó, aún era temprano.. Pero al abrir, allí estaba Yunho. -¡Yunho! ¿Qué haces aquí?- preguntó nervioso al recordar que tenía a Jaejoong durmiendo en su sofá y que su novio no sabía nada sobre eso..

-¿Y a ti qué te pasa? esperaba un beso de bienvenida o algo así, no esa pregunta.- le miró algo sospechoso, Junsu ah ocultaba algo.. -¿qué estabas haciendo?- entró en el apartamento, y no tuvo que andar mucho para ver a Jae durmiendo en el sofá..

Solo se giró a mirar a Junsu, y no le hico falta hacer ni una sola pregunta para pedirle una explicación al menor, quien sonreía nervioso como si hubiera hecho algo malo.

-Es que.. Anoche.. Jaejoongie no se encontraba bien.- ante esa respuesta, Jung se cruzó de brazos esperando algo más convincente. -¡está bien! ha discutido con Yoochunnie, ¡pero te aseguro que no me he metido en nada!- 

-Lo sé..- suspiró resignado provocando que el menor le mirase confundido. -ya sé que han discutido.. Chunnie anoche llegó mal a casa después del trabajo ¿qué demonios le pasa a este tipo?- se preguntó mirando a Jae. 

-Solo está confundido..- susurró sin dejar de verle, hasta que Kim abrió los ojos mirando a ambos. -Jaejoongie, buenos días ¿cómo has dormido?- se acercó a él, y Jae miró a ambos algo desconfiado. 

-Bien..- murmuró encontrándose con la mirada de Yunho. 

-Al menos tú has podido dormir, porque lo que es Yoochun ha pasado toda la noche en vela.- le recriminó Jung, pero en vez de enfrentarle, Jae solo agachó la cabeza. 

-No es asunto tuyo..- 

-Lo sé, pero Chunnie es mi amigo, y tú te estas portando de una forma demasiado egoísta, no eres más que un niño consentido.- 

-¡Yunho!- Junsu intentó detenerle, pero entonces Jae se levantó encarando esta vez a Yunho. 

-¡Tú no tienes ni idea de mi vida!-

-Puede que no, pero de lo que si tengo idea es de que no te has portado con Yoochunnie como se merece.-

-Chicos por favor..- por un momento Susu no supo que hacer, la tensión entre ambos era demasiada.

-¡Eso no te importa! ¡Es algo entre Yoochun y yo! ¡Y ya le dejé en claro que no me gustan los hombres!-

-¿Y por eso te acuestas con Hombres en tu trabajo?- en ese momento no pudo más y le soltó aquello provocando que Jaejoong fuera hacia él.

Junsu le detuvo.. La mano de Jaejoong justo antes de que este pudiera darle aquel puñetazo a Yunho. Le sentía temblar, podía jurar que de rabia.. ¡Pero es que Yunho no dejaba de provocarle!

-Yunho déjalo ya.. ¡Y tú también Jaejoong ah!- le soltó encarando a ambos, aquello sí que no lo iba a consentir. 

-Óyeme bien...- 

-Yunho ya basta.- Junsu intentó detenerle, pero Jung siguió hablando.

-Yoochunnie se marcha dentro de 3 días a Los Ángeles, y esta vez no voy a impedir que se vaya como la vez anterior..- ante esas palabras, tanto Jaejoong como Junsu le miraron. 

-Pero no se puede ir...- 

-Si Susu, sí que puede irse.. Él lo dejó todo por venir a buscar a su amor de la infancia tras 20 años, pero ya no tiene nada por lo que seguir aquí.- en el fondo sentía rabia, tristeza  porque Yoochun tuviera que marcharse, pero era lo mejor para él. 

Jae no dijo nada, tan solo bajó la mirada, y tras un par de segundos en silencio, pasó entre ambos marchándose de allí.

-¡Jaejoong ah espera!- le gritó Junsu yendo tras él, pero Jung le detuvo. 

-Déjale.. Quizás aún no es tarde para que se dé cuenta de lo que realmente quiere...- 

-Yunho... Dijiste que no nos metiéramos…- 

-¿Querías hacer algo por ellos no? Pues es la última oportunidad…-

******************************* 

Pasaron un par de días, no se habían vuelto a ver, tampoco a hablarse.. Ni siquiera un mensaje en el móvil del otro.. Simplemente era como si no existieran, como si jamás se hubieran conocido. 

Caminó despacito con ese ramo de flores en las manos, acercándose a aquella lapida donde descansaban sus padres. Solía ir cada año, en cada aniversario.. Pero ese día simplemente quería ir.

-Hola... es raro que esté aquí un día como hoy ¿no?- sonrió levemente y se inclinó dejando las flores. -he traído flores..- se quedó en silencio tras incorporarse, mirando el nombre de cada uno de sus padres tallado en aquella piedra. 

El cielo comenzaba a ponerse gris, la lluvia amenazaba esa tarde.. Pero aquello no era impedimento; simplemente lo necesitaba.

-Esto.. Es algo complicado de decir.. Pero hay alguien que me gusta..- sonrió algo nervioso, como si realmente tuviera a sus padres cara a cara.

-Es un chico.. Yoochun.. ¿se acuerdan de él?- preguntó sin esperar respuesta, solo una solitaria gota de lluvia mojando la piedra. -me he enamorado de él...- murmuró mirando al cielo, sintiendo las leves gotitas mojar su rostro, reconociendo aquel sentimiento... -pero lo mejor para ambos es que él se marche.- lo sabía.. Yoochun se marcharía al día siguiente, y entonces no le volvería a ver. 

La lluvia comenzó a hacerse más fuerte, mojaba su cabello, sus manos.. Pero no trató de huir.. Un poco de lluvia no hacía daño. 

-Me siento perdido, sé que me enseñaron a ser fuerte, a tomar mis propias decisiones.. Pero no es tan fácil.- ¿que podían esperar de una persona que no había tenido a sus padres? ¿A alguien que se preocupase de él?  -no soy ningún cobarde.. He estado solo, ¡y no soy ningún cobarde!- se agachó golpeando la piedra, sintiendo aquella rabia, como su cuerpo parecía pesar por culpa de ese sentimiento. 

Se quedó allí agachado, recordando como el día del funeral de sus padres se prometió a si mismo ser más fuerte, pero sentía que había llegado a su límite, que todo no consistía en ser fuerte. 

-Es hora.. De volver a casa..- sonrió levemente, y tras volver a acariciar el nombre de sus padres, se levantó de allí dándose la vuelta y caminando bajo la lluvia. 

******************** 

-Llueve...- murmuró Chunnie mientras miraba el cielo a través de la ventana. 

Ya lo tenía prácticamente todo metido en cajas, irían a recogerla a la mañana siguiente, mientras que él se marcharía al caer la tarde. 

Suspiró y siguió guardando sus cosas.. Ya no había nada que hacer; Jaejoong había decidido dejarlo, no intentarlo siquiera.. Y él ya no podía hacer nada más.. Después de todo, no era cuestión de obligarle. 

-Yoochun.. La cena está lista.- le llamó Yunho tras tocar a la puerta.

-Voy enseguida.- le respondió y se levantó saliendo de la habitación. 

Esta vez, ni Yunho ni Junsu habían tratado de impedir que se marchara.. Les echaría de menos, pero no podía seguir viendo a Jaejoong, ni tampoco abusando de la amabilidad de Yunho acogiéndole en su casa sin un trabajo adecuado para compartir los gastos. 

Suspiró y salió de la habitación; sonreiría delante de Yunho, también ante Junsu cuando tuvieran que despedirse.. Pero lo cierto, es que ese sentimiento de fracaso seguiría presente por un tiempo.

Al día siguiente recogieron sus cosas para enviarlas a Los Ángeles, y unas horas antes de salir hacia el aeropuerto, Yoochun acababa de preparar su equipaje de mano. Ya estaba todo listo; en unas horas estaría de camino a casa, con su familia.. Y en su antiguo puesto de trabajo.. Después de todo, había tenido suerte de recuperarlo.

Miró hacia la ventana, seguía lloviendo desde la tarde anterior. Miró su móvil esperando algún mensaje de Jae.. Pero solo encontró esa fotografía de fondo de pantalla.. La que se habían hecho la última noche que pasaron juntos.

Sonrió dulcemente ante aquella imagen, Jaejoong era sin duda lo más importante en su vida, pero él parecía no necesitarle. Sabía que no le podría olvidar, así que solo quedaba guardar ese recuerdo. 

Escribió un mensaje, el ultimo.. "te escribo para despedirme de ti.. En unas horas estaré de camino a Los Ángeles.. Es lo mejor para ambos; No, nos volveremos a ver.. Solo quiero que sepas que siempre vas a ser la persona más importante para mí, y darte las gracias por haberte podido encontrar.. Te deseo lo mejor, ojala puedas lograr tu sueño algún día.."  Lo envió con lágrimas en los ojos, y cuando Yunho le avisó que ya estaba el taxi en la puerta, se secó las lágrimas acabando de guardar sus cosas..

***************** 

Sus manos temblaron tras leer aquel mensaje. Yoochun se estaba despidiendo, se marcharía en unas horas.. Y entonces ya no habría nada que hacer. En ese momento aquella imagen de su infancia volvió a su mente.. Como Yoochunnie se alejaba en ese camión de mudanzas, como le prometía que volvería  por él. Tantas promesas. ¡Solo eran unos niños entonces! Pero 20 años después, Chunnie había vuelto a buscarle.

-Jaejoong ah, ¿qué esperas para desnudarte?- le llamó la atención el director. -no pretenderás que grabemos la escena contigo vestido ¿verdad?- todos en el set rieron, y Jae esbozó una falsa sonrisa. 

Sin decir nada guardó su móvil y empezó a quitarse la ropa.. Después de todo tenían que comenzar la grabación. Justo ese día.. El día en que Yoochun se marchaba a Los Ángeles. 

Quiso quitarse eso de la cabeza; ya no había motivo para pensar más en él.. Cada cual haría su vida y ya está, justo como tenía que haber sido desde el primer momento en que se encontraron. 

Su delgado cuerpo quedó desnudo ante los ojos de aquellas personas.. Podía sentir como la mirada de ese hombre con quien actuaría se clavaba en él.. Como parecía estar ansioso por tenerle de aquella manera. 

-Estoy listo.- dejó caer la última prenda al suelo y se tumbó en la cama como marcaba el guión.. Esperando la señal que daría comienzo a la grabación. 

-¡Acción!- ahí estaba.. En ese momento, una cámara enfocó su rostro.

Aquel hombre se sentó a su lado.. La mano de este se posaba sobre su muslo mientras con la otra se acariciaba a si mismo entrando en situación. No podía evitar sentir asco, precisamente por eso le costaba centrarse en un principio, conseguir que su cuerpo respondiera.. Pero era trabajo, solo trabajo. 

La mano de aquel hombre subió por su pierna, y cuando este se inclinó a besarle, cerró fuertemente los ojos resistiéndose a ese beso.

-¡Corten!- el actor se detuvo ante la orden del director.  -¿Jaejoong ah ocurre algo? ¡Parece como si estuvieras muerto!-

-Estoy bien.- dijo enseguida, pero realmente sentía su cuerpo temblar, negarse de algún modo. 

-¿Podemos continuar?- le preguntó el actor, y Jae solo asintió tomando aire para seguir. 

Comenzó aquel beso.. Sentía los labios de ese hombre recorrer su cuello, su pecho.. Sus pezones hasta erectarlos intencionadamente..   Como las manos de este le tocaban buscando conseguir una erección, pero en ese momento su cuerpo seguía sin responder.

Entreabrió los ojos mirando al techo y apretó las sabanas; por un momento buscó imaginar algo que le excitara, que le ayudase a hacer su trabajo.. Pero cuando Yoochun pasó por su cabeza, su cuerpo tembló recordando esas caricias. 

Los dedos de ese hombre insistían sobre su cuerpo, pero nada pasaba. ¡No era lo mismo! las caricias, los besos de Chunnie, ¡nada era igual! ¡Aquello no había sido por trabajo, no había sido fingido! recordó cuando Chunnie le dijo "te quiero", como su cuerpo se había estremecido, como había disfrutado de verdad por esas caricias, por su forma de hacerle el amor.. Tan diferente a lo que hacía con esos hombre. 

De repente abrió los ojos de par en par, se incorporó y detuvo la mano de ese hombre quien se le quedó mirando. Respiraba agitado, negaba con la cabeza.. Por un momento sintió pánico de seguir, de dejarse tocar por otra persona que no fuera Yoochun. 

-No.. No puedo seguir.- se cubrió la cara con ambas manos. 

-¿Oye estas bien?- le preguntó el actor confundido pensando había hecho algo mal… aunque ya habían actuado juntos alguna vez y había ido bien.

-¡No! ¡No estoy bien! se va a marchar...- murmuró con la voz entrecortada, pero nadie allí entendía que estaba ocurriendo. 

-¿Quién se va a marchar?- preguntó el  actor poniendo su mano sobre el hombro del chico.

Jaejoong le miró, retiró la mano de aquel hombre, y se levantó rápidamente de allí cubriéndose para ir a buscar su ropa. 

-¿Qué demonios te pasa mocoso?- le gritó el director cabreado.

-¡Tengo que ir a buscarle!- comenzó a vestirse deprisa, pero el director se acercó a él intentando detenerle.

-¡Estamos en mitad de un rodaje! ¡No vas a ir a ninguna parte!-

-¡Sí que lo haré!-

-No, ¡no vas a hacerlo!-

-¡Lo dejo!- gritó dejando a todos sorprendidos. -¡dejo este maldito trabajo! ¡Lo odio! y por culpa de esto voy a perder a Yoochunnie...- murmuró sintiendo sus labios temblar y su voz quebrarse por las lágrimas. 

Se hizo el silencio en la sala… a continuación murmullos.. Y cuando a su manager estuvo a punto de darle un ataque al corazón, el director tuvo la última palabra…

-Márchate.. Pero no vuelvas.- Jaejoong no dijo nada, tan solo salió corriendo de allí lo más rápido que podía, aún estaba a tiempo de ver a Chunnie. 
-¡Te vamos a echar de menos!- Junsu le abrazó una vez más mientras Yoochun aguantaba aquel nudo en la garganta ocultándolo bajo una leve sonrisa. 

-Vamos Susu.. No lo hagas más difícil.- le animó Jung a punto de llorar también.

-Pero es que.. Es que...- se mordió los labios mirando a Chunnie, ¡no quería que se marchara!

-Chicos.. Yo también los voy a extrañar, me ha encantado conocerlos.- les dijo sinceramente, provocando una sonrisa por parte de Yunho y un nuevo puchero en los labios del menor.  -pero tengo que marcharme.. Es lo mejor.- bajó la mirada por un momento, en cierto modo sentía que había fracasado a pesar de haber vuelto a ver a Jaejoong.

-Vendrás a vernos ¿verdad?- Chunnie asintió ante la pregunta de Junsu. -¡y nosotros iremos a verte!-

-¿Con qué dinero?- bromeó Jung, aunque lo cierto es que podrían intentarlo en un futuro.. 

-¡Entonces trabajaremos aún más duro para ahorrar!- dijo decidido.

Yoochunnie rió ante la escena de sus amigos; sin duda había conocido a buenas personas durante esos meses, solo que lo de Jaejoong no había salido bien..

-De verdad, gracias por todo.. Sin ustedes no hubiera conseguido.. Encontrar a Jae.- sonrió levemente, algo triste, y suspiró.

-Yo siento que no haya salido bien.- Jung puso una mano sobre el hombro de Yoochun, y este negó en respuesta. 

-Tenía que intentarlo al menos.- suspiró de nuevo, al final Jaejoong ni siquiera había respondido a su mensaje. -bueno, es hora de marcharme. -cogió su equipaje de mano, y tras una última sonrisa, se dio media vuelta.

-Yoochunnie.. Ten buen viaje, nos volveremos a ver.- ante las palabras de Yunho, Chunnie alzó su mano en el aire sin dejar de caminar.

Ambos se quedaron en silencio mientras veían a su amigo partir.. Al final él no había conseguido su propósito.. Al menos no del todo, y aquello era realmente triste, pero esta vez, no podían detenerle para que se quedase. 

-Es una lástima.. Hubiera sido bonito..- suspiró Junsu captando la atención de Yunho.

-Vamos, nos quedaremos hasta ver el avión despegar..-Junsu solo asintió en respuesta sin decir más y le siguió sintiendo el calor de la mano de Yunho sobre la suya.. Aquello le hizo sonreír y sentirse de verdad afortunado.

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-¿No puede ir más deprisa?- le preguntó al taxista quien le miró a través del espejo retrovisor.

-Hay un atasco, no puedo volar sobre los coches.- respondió el hombre algo irónico.

-Pero tengo que llegar al aeropuerto en cuestión de...- miró su reloj, era tarde, ¡muy tarde! -¡en cuestión de ya!- 

-Lo siento, pero no puedo correr si estamos en un atasco.. Esto es lo más rápido que puedo ir.- 

-¡Pues no es suficiente! ¿No se da cuenta que Yoochunnie está a punto de marcharse a Los Ángeles?-

-¿Y quién es ese tal Yoochunnie?- 

-Déjelo, ¡usted no lo entiende!- sacó dinero de su cartera y se lo extendió al taxista. -es suficiente ¿no? pare aquí, iré corriendo.- le dijo decidido.

-Estás loco muchacho.. No llegaras al aeropuerto..- rió algo divertido.

-¡Pero al menos no estaré aquí parado! ¡Podre hacer algo por detenerle!- ante aquella decisión, el hombre se encogió de hombros, aceptó el dinero y se detuvo.

-Chico, suerte.- le sonrió.

-¡Gracias!- jaejoong le devolvió la sonrisa, y saliendo del taxi echó a correr camino al aeropuerto.

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Suspiró una vez más mientras guardaba la cola para embarcar. No quería volverse y mirar atrás.. Si lo hacía, entonces no tendría el suficiente valor para marcharse. Todo había acabado ya; lo había intentado con Jaejoong, había tratado de ayudarle, de ofrecerle una vida mejor.. Y la oportunidad de intentar hacer realidad su sueño.. Pero todo parecía haber sido en vano.

-Disculpe ¿va a subir al avión?- le preguntó la chica que esperaba a que Yoochun reaccionara. -disculpe señor.- le volvió a llamar.

Yoochun la miró saliendo de sus pensamientos.. Por un momento no supo que hacer. ¡No quería dejar a Jaejoong! pero después de todo, Jae ya le había dejado a él..

-Sí, disculpe.- le sonrió levemente y pasó junto a la chica, ya no había que mirar atrás. 

*********************** 

Corría todo lo que sus piernas le daban... en su vida recordaba haber corrido tanto como lo estaba haciendo esa tarde. El sol comenzaba a ponerse, y su corazón latía acelerado por la carrera, y por detener a Yoochun.

No.. ¡No quería que se marchara! ¡No quería quedarse sin Yoochun! sin aquella persona especial que tanto le había ayudado, quien le había cambiado casi sin darse cuenta.. 

-¡Yoochun!- gritó entrando al aeropuerto.

Miró a un lado y a otro, muchas personas con sus respectivas maletas esperaba allí a ser llamadas, mientras que otras parecían esperar a sus familiares o amigos más allegados. Siguió buscando, ¡no podía detenerse en ese momento! tenía que encontrarle, ¡impedir que se marchara! y decirle lo que realmente sentía.

Miró en aquel enorme panel electrónico.. El vuelo hacia Los Ángeles acababa de efectuar su salida. Negó con la cabeza, ¡no podía ser! pero cuando miró la hora se dio cuenta de que así era..

-¡Yoochunnie! ¡No te puedes marchar!- corrió hacia la puerta de embarque indicada, nadie quedaba allí.. Solo aquella chica encargada de supervisar el embarque..

-¡Estoy buscando a una persona! ¡Déjeme pasar!- le gritó alterado, asustando a la chica.

-Disculpe, el vuelo acaba de efectuar el despegue.- le informó la muchacha amablemente.

-¡No! ¡No puede ser! ¡Él no puede marcharse!- gritó desesperado.

-Tendrá que calmarse o tendré que llamar a seguridad.- le dijo ella seriamente, pero Jae no estaba dispuesto a darse por vencido, no esta vez.

-¡Déjeme pasar! ¡Solo será un momento!- intentó colarse, y ella rápidamente llamó a seguridad. -¡Yoochun!- gritó su nombre esperando que él no hubiera subido al avión, pero enseguida un tipo bastante más grande que él le detuvo.

-¿Qué está pasando ahí?- preguntó Yunho girándose a mirar hacia el lugar, y al ver a Jaejoong, sus ojos se abrieron de par en par.. -es Jaejoong ah...- murmuró llamando la atención de Junsu quien no dejaba de llorar y sonarse la nariz tras ver como el avión despegaba. 

-¡Eh dicho que tengo que detenerle!- gritó mientras el guarda de seguridad le sacaba de allí. 

Yunho y Junsu se acercaron rápidamente, y tras disculparse con el guarda y convencerle de que le soltara, sacaron a Jae de allí.. 

-Jaejoong ah.. ¿Has venido.. Por Yoochunnie?- preguntó Junsu impresionado, pero él y Jung se miraron enseguida..

-¿Dónde está? ¡Tengo que verle! ¡No quiero que se marche a Los Ángeles! van a ayudarme, ¿verdad?- preguntó desesperado, casi con lágrimas en los ojos..

-Jaejoongie... Yoochun ah se ha marchado, su avión ha despegado, él vuelve a Los Ángeles..- le explicó Yunho mientras el mayor negaba con la cabeza sin querer creerle. 

-No...- murmuró retrocediendo un par de pasos.

-Jaejoong.. Has llegado tarde, lo siento..- los grandes ojos de Jaejoong se clavaron en los de Junsu tras esas palabras, y en ese momento, el menor sintió como se le partía el corazón. 

-¡No es justo!- gritó arrodillándose en el suelo, dando un puñetazo de pura impotencia. -¡no tenía que marcharse! yo.. He venido a buscarle...- rompió a llorar escondiendo su rostro, sintiendo las lágrimas caer sobre sus manos.. 

En ese momento, Junsu y Yunho no supieron que decir.. Solo se miraron, y entonces fue el más joven de ambos el que se agachó junto a él poniendo una mano sobre el hombro de Jae. 

-Quizás esta vez te toque a ti, ¿no crees?- Jaejoong le miró sin entender. -esta vez te toca a ti ir a buscarle.- le sonrió levemente, y Jaejoong solo respondió asintiendo decidido. 

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Dos semanas más tarde...

-Yoochun en cinco minutos tenemos la reunión, así que date prisa.- le avisó uno de sus superiores.

-Enseguida voy.- recogió los papeles dejándolos ordenados sobre su mesa y enseguida se levantó.

Se estiró un poco y colocó bien su ropa antes de acercarse a la enorme cristalera del despacho. No solo había recuperado su trabajo al volver a Los Ángeles, si no que le habían ascendido a un puesto superior.

Sus padres estaban contentos con su vuelta a pesar de que nada más llegar a casa, Yoochunnie había decidido independizarse. También sus amigos y compañeros le habían dado una calurosa bienvenida... todo parecía ir bien, pero a pesar de lo maravillosa que podría sonar su vida para cualquier persona, no era del todo feliz.

Suspiró pesadamente mientras miraba por la ventana.. Lo tenía todo, era cierto.. Pero no tenía a la persona más importante en su vida. Muchos habían comentado que estaba más delgado, que su sonrisa no era la misma desde que volvió de Japón.. Pero Chunnie solo sonreía restándole importancia.

No había vuelto a saber de Jaejoong, y a pesar de que durante esas dos semanas había conseguido contactar con Yunho y Junsu a través de una vídeo llamada, ninguno de los tres había sacado ese tema.. 

Miró la hora sobresaltándose, ¡llegaría tarde si seguía pensando en eso! así que cogió sus cosas y salió del despacho directo a la sala donde tendría lugar la reunión; siendo una importante productora, ese tipo de juntas eran demasiado habituales, y ahora que tenía un puesto superior, debía asistir a ellas y aprender. 

Los minutos pasaban lentos sentado a aquella mesa con el resto de personas que estaban presentes en la reunión, aun no podía opinar demasiado... solo observar, tomar nota.. Y no perder detalle alguno. Aquello comenzaba a aburrirle, las horas se hacían eternas.. Pero cuando ya pensaba que por fin la reunión llegaría a su fin, comenzó a oírse escándalo fuera de la sala..

-¡He dicho que tengo que verle!- repetía en un inglés mal hablado mientras otro hombre intentaba evitar que irrumpiera en la sala.. -¡solo será un momento! ¡Yoochun tiene que saber que estoy aquí!-  consiguió zafarse, al menos el ser Delgado y un poco más pequeño que ese hombre le había dado cierta ventaja... y cuando abrió la enorme puerta, todas las personas allí presentes se quedaron mirándole.. -esto.. Buenas tardes...- al oír aquella voz, Yoochun se giró a mirar de inmediato, encontrándose con la mirada de Jaejoong.

Se quedó completamente paralizado, sentía su cuerpo temblar, arder.. Así como un sudor frío recorrer su espalda. ¡No podía ser! ¡Jaejoong estaba allí! parado frente a esas personas, mirándole solo a él.. Serio, decidido.. y cuando el mayor se acercó tembloroso a él, Yoochun se levantó de su sitio.

-Jae ah.. ¿Qué haces aquí?- le preguntó en voz baja, sin siquiera saber si aquella situación era real o si se había quedado dormido en la junta... 

-He venido a buscarte.- apretó sus puños, ¡le había costado la misma vida arreglarlo todo en tan solo dos semanas y conseguir viajar hasta Los Ángeles! aun con la ayuda de Junsu y Yunho.. Y más le había costado entrar a esa sala.

-¿A buscarme? pero como.. Como has sabido donde...-

-Se lo dijiste a Yunho, ¿no? él y Junsu me ayudaron.. Son buenos amigos en realidad..- reconoció aquello avergonzándose, pero Yoochun aun no salía de su asombro.

-Pero tú..-

-¡No tenías que haberte marchado sin mí!- le interrumpió volviendo a encararle. -¿no habías vuelto para buscarme? ¿Para qué te marchas entonces?- le reprochó  dolido por eso.

-¿Porque tú me rechazaste?- le preguntó el menor irónicamente, molesto incluso. 

-Por eso.. He venido a buscarte...- Yoochun le miró sin llegar a entender aun.. -porque.. Jamás quise rechazarte...- susurró sorprendiendo a Chunnie. -ya ves.. Me he enamorado de ti... ¡y eso me jode! pero.. No quiero.. Que estemos separados.. No quiero perderte de nuevo Yoochun...- le miró con los ojos algo brillantes, sincero.. Realmente quería estar con él.

-Jae..- no podía creerlo... todo su cuerpo temblaba al oír esas palabras, al ver a Jaejoong tan avergonzado pero reuniendo tanto valor como para reconocer sus sentimientos. 

-Yoochun, ¿podemos seguir?- interrumpió uno de sus compañeros haciéndole volver a la realidad.. Pero Yoochun solo acertó a mirarle desconcertado... dándose cuenta de todas esas personas que a pesar de no entender el japonés, les estaban mirando.

-¡De eso nada! ¡Yoochun se viene conmigo!- le tomó de la mano, y tirando de él corrió hacia la salida. 

-¡Jae! ¿Qué estás haciendo?- le gritó mientras corría tras él.. Pero Jaejoongie solo siguió corriendo.

Le miraba mientras corrían.. En ese momento el hecho de que le regañasen no era su preocupación; si no el cómo y el por qué estaba allí Jaejoong. Ambos se detuvieron en mitad de un pasillo, y antes de que Yoochun pudiera decir ni siquiera una palabra, los labios de Jae se pegaron a los suyos robándole un apasionado beso. 

Las manos del menor se deslizaron hasta la cintura de Jaejoong, y este suspiró entre sus labios envolviendo sus brazos alrededor del cuello de Yoochun. Por un momento aquel beso se hizo el más maravilloso del mundo para ambos, y cuando se separaron para verse, Jae desvió la mirada soltando una risita avergonzada. 

-Ya ves lo que has conseguido.. No sabes cuánto me ha costado poder viajar hasta aquí.- deslizó levemente sus manos, hasta apoyarlas en el pecho del menor. -te busqué en el aeropuerto para detenerte, pero llegué tarde..- Yoochun le oía atentamente, sin querer soltarle.. Sintiendo tanto sus manos como el cuerpo de Jaejoong temblar.

-¿Has venido.. Para quedarte?- le preguntó algo temeroso de su respuesta, pero Jae asintió levemente. -¿y.. Tu trabajo?- eso le dio más miedo aun..

-Lo he dejado..-

-Lo dices.. ¿De verdad?-

-No quiero seguir haciendo algo que no me gusta.. En cambio, ¡quiero cantar! ¡Quiero luchar por mi sueño! así que acepto! ¡Acepto intentarlo Chunnie! ¡Quiero triunfar en el mundo de la música!- ante aquella decisión, Yoochunnie acabó sonriendo, y seguidamente revolvió aquel cabello platino. 

-Estoy seguro de que lo lograremos.- Jae asintió, y el menor volvió a atrapar aquellos labios en un dulce beso.

Por primera vez en su vida se sentía satisfecho; feliz de intentar hacer lo que realmente deseaba.. Yoochunnie le había enseñado, por su insistencia en encontrarle después de 20 años.. Por cumplir esa promesa y luchar por lo que de verdad se quiere. 

-Chunnie.. No tengo hotel donde quedarme...- le dijo en un tono mimoso, caprichoso incluso.. Haciendo reír al menor.

-No te preocupes, puedes quedarte en casa todo el tiempo que necesites.- le abrazó pegándole más a su cuerpo.. No le dejaría escapar.

-Y podré dormir contigo?- ante aquella pregunta, Yoochun se echó a reír, y sin responder, volvió a besar al mayor.

************************** 

Tokyo, 1 año más tarde...

-¡Waaaaaaaaaaaaaaaaa! ¡¡No me puedo creer que vayamos a ver a Jaejoong en persona!!- gritó Junsu entusiasmado mientras miraba de nuevo aquel vídeo en Internet.

-Susu.. ¡Ya conocemos a Jaejoongie!- rió Yunho ante las ocurrencias de su novio con quien convivía desde hacía unos meses.

-Lo sé, lo sé.. ¡Pero ahora vamos a verle siendo un idol! es mucho más emocionante, ¿no crees?- se giró a mirarle, Yunho seguía intentando concentrarse en leer ese libro, pero no había caso con Junsu canturreando las canciones de Jaejoong.. 

-¿Sabes qué? lo más importante de todo esto es que está haciendo realidad su sueño, y que Yoochun también pudo hacer el suyo.- cerró el libro y se levantó para ir hacia Junsu y apagarle el ordenador.

-¿Qué estás haciendo?- refunfuñó poniendo un puchero en sus labios, pero Yunho lo borró con un beso.

-Tenemos que prepararlo todo, mañana tenemos visita ¿recuerdas?- susurró pegándose a los labios del menor, y este solo sonrió volviendo a besar a Yunho.

********************* 

Mientras tanto, en Los Ángeles.. 

-De acuerdo, dejaremos ese asunto para la vuelta, muchas gracias por todo.- colgó el teléfono con una sonrisa, y al oír como la puerta se abría, miró hacia ella viendo como Jaejoong asomaba la cabecita.

-Yoochunnie~~ ¿podemos irnos ya a casa? en unas horas tenemos que coger un avión ¿recuerdas? y me gustaría darme una ducha antes y comer algo.- entró refunfuñando, yendo hacia donde se encontraba su ahora productor, y pareja.. 

Llegó rápidamente hasta él y se sentó descaradamente en el regazo del menor, envolviendo el cuello de este con sus brazos y robándole un beso.

-¿No tenías prisa por volver a casa?- le preguntó algo travieso, envolviendo igualmente la cintura del mayor con sus brazos. 

-Uhm~~ si, pero es que estas tan sexy vestido con ese traje y corbata~~- jugó con la corbata de Chunnie, desatándola y abriendo un par de botones de la camisa.

-Mentira, ya me has dicho que no me sientan bien los trajes, no cambies ahora de opinión.- ambos rieron un poquito , y cuando tocaron a la puerta, Jaejoong se separó discretamente.. Aunque su relación ya no era secreto para nadie en la empresa.. 

Yoochun acabó de atender un pequeño asuntó mientras Jaejoong lo esperaba mirando todo en ese despacho.. Sonriendo travieso al recordar las veces que ya había "atacado" a Yoochunnie allí mismo, bajo la mesa.. 

-¿Nos marchamos ya?- preguntó al sentir como Chunnie le abrazaba desde atrás.

-Sí, un vuelo a Tokyo  nos espera..- susurró en su oído haciendo sentir un cosquilleo al mayor. 

Al día siguiente, y tras varias horas de vuelo desde Los Ángeles, el avión efectuaba su aterrizaje en aeropuerto nipón, y nada más bajar de allí y recoger su equipaje, oyeron una voz muy conocida..

-¡Yoochunnie! ¡Jaejoongie!- gritó Junsu yendo hacia ellos.

-¡Junsu ah!- Jaejoong gritó igualmente corriendo hacia el menor y saltando sobre él casi tirándole al suelo.

-¡Eh! ¡Cuidado! ¡Vas a tirarme!- le regañó mientras reía, aunque realmente se alegraba mucho de verles, y de ver que por fin Jaejoong no estaba solo.

-Chicos bienvenidos.- saludó Yunho formalmente, aun así, una amplia sonrisa se dibujó en sus labios. 

Tras los saludos fueron a tomar un taxi; habían acordado quedarse a dormir con Yunho y Junsu.. A pesar de que en la empresa habían insistido en reservar una habitación en un hotel para ambos.. Pero después de un año, tenían mucho que contarse... y unas horas más tarde, ya se encontraban celebrando el reencuentro...

-¡¡¡¡SALUD!!!!- gritaron los cuatro al hacer chocar sus copas...

Nada más dejar sus maletas, los cuatro se marcharon a un restaurante a cenar y celebrar que volvían a reunirse.. La noche se presentaba animada, y alguno que otro ya había bebido un poco más de la cuenta..

-¡No puedo creer aun que te hayas convertido en todo un idol!- Junsu le miró impresionado, Jaejoong tenía ese aire que le hacía verse genial, pero para él seguía siendo ese vecino poco sociable que había conocido hacia algo más de un año.. -tu pelo ha cambiado un poco ¿verdad?- 

-¡Sí! ¡Ahora lo llevo algo más corto! pero el color es básicamente el mismo.- rió divertido, halagado de que su amigo le viera como alguien genial. -¡¡SALUD!!- alzó su copa de nuevo con las mejillas sonrojadas y brindo esta vez con Junsu quien sirvió un poco más para ambos..

 -Es increíble cómo ha cambiado.. Antes ni siquiera quería estar cerca de nosotros.- comentó Yunho mientras miraba a Jaejoong beber felizmente. 

Yoochun sonrió tontamente al verle; sabía que Jaejoongie por fin era feliz.. Que él le había ayudado un poquito a serlo.. A conseguir su sueño y poder cantar. 

-En realidad.. Hemos venido tan repentinamente por un motivo..- Yunho le miró curioso. -¡chicos! ¡Tengo algo que decirles!- llamó la atención de los otros tres, pero Susu y Jae seguían con esa tonta risita. -dejen ya de beber y escúchenme un momento.- les regañó poniéndose algo serio. -en realidad.. Hay un motivo especial por el que hemos venido tan de repente a Japón..- miró a Jaejoong, y este le devolvió la mirada algo serio sin saber de qué se trataba. -pasado mañana tenemos una importante reunión, es la oportunidad para que Jae ah pueda debutar en este país.- nada más decir eso, Jaejoong abrió los ojos de par en par sin creerlo.. 

-¿En serio? ¿Debutará en Japón?- preguntó Susu impresionado, y Yoochun solo asintió sin dejar de ver al mayor de los 4.. 

-Si todo sale bien, en unos meses estaremos presentando tu trabajo en nuestro país..- sonrió al ver los ojos de Jae brillar de felicidad, y cuando este se lanzó a abrazarle, Chunnie respondió envolviéndole entre sus brazos.

-¡Gracias! ¡Gracias! ¡Gracias! - gritó realmente feliz, por fin su sueño se vería cumplido del todo. 

-Susu no llores..- Yunho rió divertido al ver a su novio llorar presenciando la escena mientras abrazaba la botella de vino.. -¡y deja ya de beber!- se la quitó en las manos, y esta vez fue él quien llenó las copas del resto..  -¡esto se merece un brindis!-

-¿Eh? y yo qué?¡ no me has servido!- protestó Junsu con lágrimas aun en los ojos y un infantil puchero.

-Tu brinda con eso que te queda en la copa, ya no te dejaré beber más..- 

-¡No es justo!- lloriqueó viendo al resto alzar sus copas, así que finalmente hizo lo mismo brindando con ellos..

************************** 

Apenas estaba amaneciendo, era demasiado temprano aun.. Pero en unas horas debía asistir con Yoochun a esa importante reunión, y por supuesto, no quería dejar pasar más tiempo sin ir a visitarles.. 

Jaejoong se detuvo frente a la tumba de sus padres, se arrodilló y dejó un ramos de flores enorme sobre la piedra.. Esas que siempre había visto a su padre regalar a su madre por algún aniversario cuando era pequeño.. 

-Pues aquí estoy.. De vuelta en Tokyo...- sonrió suavemente, pero esta vez, no tenía esa sensación de angustia en su pecho. -aunque debo volver a Los Ángeles en un par de días... ya saben, ahora soy todo un idol.- rió un poquito y miró un segundo al cielo; el día comenzaba a ser soleado.  -he.. Dejado parte de mi pasado atrás.. Así que no se preocupen por mí, Yoochun está conmigo, él me cuida demasiado.. ¡A veces más de lo que necesito! pero está bien así.. Él es.. La persona más importante en mi vida.. Sin Yoochun, jamás lo hubiera logrado.- sintió una mano acariciar su espalda y sonrió girándose a mirar a Chunnie. 

-Siempre cuidaré de él.- dijo aquello formalmente e hizo una leve reverencia ante la lápida. 

-¡No seas tan formal!- ambos rieron levemente, pero Jae de nuevo se dirigió a sus padres.. 

-Ahora.. Realmente soy feliz...- acabó diciendo aquello y se volteó a mirar a Chunnie de nuevo quien la devolvió la sonrisa. 

Se levantó de allí tras despedirse de sus padres, sintiendo aquel abrazo por parte de Chun; aquella calidez que recorría todo su cuerpo haciéndole sentir la persona más afortunada del mundo..

-Así que.. ¿Te hago feliz?- preguntó algo avergonzado, mirando al suelo..

-¡Claro que sí! ¿Qué pasa contigo? ¿Es que acaso lo dudas?- le refunfuñó haciendo que Chunnie le mirase algo tímido... -¡te has sonrojado!- rió divertido señalando las mejillas del menor y como este se ponía nervioso. 

-¡No es cierto!-

-¡Si lo es~~!- las pellizcó con ambas manos y le robó un beso en los labios, pero antes de que Chunnie le regañara, se adelantó caminando a paso ligero, sonriendo traviesamente y de forma triunfante. 

Yoochunnie se quedó mirándole como un tonto.. ¡Jaejoong no podía hacer tan libremente esas cosas en Japón! menos en un cementerio... aunque una tonta sonrisa se dibujó en sus labios. En ese momento vio en Jae aquel niño de 6 años que le había enamorado, aquel al que había prometido que regresaría a buscarle.. Sin duda, y después de 20 años, Yoochun también había encontrado la felicidad. 


Fin... 

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