Estoy enfermo, no puedo dormir, no puedo comer, no puedo caminar y mucho menos correr, no puedo respirar, no puedo ver, no puedo despertar… ¿dónde estoy?
Su cuerpo se sentía liviano y abrigaba una paz como jamás lo creyó sentir, mantenía los ojos cerrado y estaba tendido en algo tan blando como el algodón, una suave voz lejana alcanzo a percibir, podía jurar que habían dicho su nombre, se removió del cómodo lugar donde se encontraba, abriendo lentamente los ojos para darse cuente del hermoso sitio en la que se encontraba como si se tratara del paraíso. Movió su cuerpo y sus pies descalzados tocaron el cálido suelo, todo le causaba extrañeza era casi todo tan irreal, como paradisiaco.
Dio los primero pasos y su vista se poso en un hermoso lago,
-Que es todo estos?...- se pregunto….- retomo el camino y una vez más escucho esa voz, miro para todos lado para hallar a la persona responsable de aquello, pera nada, cuando estuvo frente de ese hermoso lago pudo ver como el agua era tan cristalina que podía ver el fondo, se inclino y hundió una de sus manos, se sentía bien, el agua estaba fresca. Pero porque sentía que algo no iba bien por muy hermoso y placentero que sea el lugar, algo dentro de su corazón decía que no debía estar ahí.
-Dónde estoy?... dijo mirando fijamente su mano en el agua.
No supo cuanto tiempo estuvo observando ese lago, pero le era placentero, toda su paz fue interrumpida por unos pasos que lo alertaron, se giro para ver de qué se trataba, y lo que vieron sus ojos a metro del hicieron que se levantara rápidamente, no podía creerlo era el, sus lagrimas no tardaron en salir y corrió a los brazos de su amado.
-Minnie!..- dijo Jaejoong emocionado…
-Jae…- dijo Changmin con ternura y una voz triste, respondiendo al abrazo del que ahora lo abrazaba con fuerza.
- Donde estuviste? ¿Que es todo esto?...-Pregunto el más bajo sin soltar el cuerpo de su amado.
-Jae tu no debes estar acá, tienes que irte…-dijo este sin responder a lo que decía Jaejoong.
- Irme?, pero que estás diciendo.
-Sola vete antes de que sea demasiado tarde.
-No entiendo, para donde tengo que irme.
-Vamos por favor solo hazme caso.
- Vamos juntos, tú te vienes conmigo.
-Yo no puedo acompañarte Jae, lo siento…- dijo este alejando el cuerpo de Jaejoong, para verlo a los ojos…-Perdóname pero tengo que irme.
-Minnie tu…
-Lo siento.
- Espera…- dijo este tomando se mano.
-Jae, por favor.
-No quiero, dijiste que estarías para siempre conmigo.
-Perdón, pero ya no puedo.
-Te amo, no me dejes por favor, quédate conmigo.
-Yo también Te amo con todo mí ser, pero tu vida tiene que seguir. Sé que pronto nos volveremos a ver...- dijo este acercando sus mano al rostro de Jaejoong y cautelosamente tomar sus labios, dejando caer una lagrima.
- No espera…- decía Jaejoong con lágrimas en los ojos al ver como desaparecía delante de sus ojos, el cuerpo de su amado…
-Changmin… Changmin vuelve, vuelve conmigo no me dejes.
Sus ojos se abrieron e inmediatamente un fuerte dolor en su pecho se instalo, todo estaba en penumbra, sus ojos miraban tratando de reconocer el lugar exacto donde se encontraba, llevo sus manos a su rostro y noto lagrimas, su cabeza daba vuelta y de pronto imágenes empezaron a pasar por su cabeza, lago, aguas cristalinas y la figura de… -Changmin .. Dijo este con la voz rota.
Todo el mundo se le vino encima cuando recordó lo que había pasado, se levanto rápidamente con la respiración acelerada y salió de la habitación, sin tomar en cuenta las advertencias de Honki que al verlo salir tan escandalizado trato de detenerlo. Jaejoong solo tenía una sola cosa en su cabeza… ver a Changmin y asegurarse de que todo estaba bien… se zafo del agarre de su ahora actual guardaespalda y se dirigió corriendo hacia la habitación 2618.
Corrió con todo los que sus piernas dieran, no le importo los gritos, ni los obstáculos en su camino. Solo deseaba llegar a esa habitación que se encontraba su amor, la persona que jamás pensó enamorarse, la persona que siempre estuvo ahí para él, su Guardaespalda, Su Changmin.
Con el corazón acelerado al igual que su respiracion y los ojos llenos de lágrimas llego a su destino, tenía miedo de lo que pudiera encontrarse pero tenía que hacerlo, no aguantaba esa angustia que no lo dejaba respirar con normalidad. Miro la puerta que aun mantenía esa placa que decía Shim Changmin, tomo el picaporte y lo giro con las manos temblorosas. Y lo que pudo apreciar fue lo que lo dejo anonadado, sus sentidos se volvieron locos, y las lágrimas rodaron por su rostro, sus piernas tocaron el piso.
En ese mismo momento esa habitación estaba en total soledad y obscuridad, ningún cuerpo, ningún médico, nada solo era un cuarto vacio.
Todo se volvía nada, que es lo que había ocurrido, realmente Changmin se había atrevido a dejarlo solo. Sus puños tocan una y otra vez el suelo haciendo sangrar sus nudillos.
-No, No. No Idiota, donde estas, no puedes dejarme ahora que te necesito más que nunca... NOOOO!!!...- grito con todas la fuerza dañando sus cuerdas vocales.
Al otro lado del pasillo se acercaba corriendo Ji Hoon, al ver tirado a Jaejoong temió lo peor. Llego hasta el lugar y miro la habitación vacía y entendió el comportamiento de su sobrino.
-Mi pequeño, vamos no te lastimes mas tienes que ser fuerte…- decía con ternura tratando de impedir que diera otro golpe en el suelo ya con sus manos ensangrentadas.
Con todas sus fuerzas abrazo a su sobrino y lo levanto del suelo en la que se encontraba devastado. Podía ver en los ojos de Jaejoong una mirada triste que le calo en el corazón, trago hondo no quería llorar en ese momento, sentía frustración y tristeza porque lo sucedido con Changmin que también era su sobrino y le dolía en el alma haber caído en la realidad que ya no estaba, pero tenía que demostrar fortaleza a Jaejoong aunque solo deseaba llorar junto a él.
Maldecía a los cielos porque siendo desde pequeño a su sobrino le había tocado sufrir como a ningún otro, primero fue su padre la única persona que amaba de verdad y ahora le habían arrebato a Changmin, la única persona que lo hiso sonreír y creer que podía volver amar.
De la tristeza paso a la cólera, camino con Jaejoong hasta la habitación devuelta y cuando vio como los amigos de este corrían hacia el no tuvo vacilación para dejárselo a su cargo.
-Cuídenlo, vuelvo enseguida…- decía este con ira inyectada en sus ojos.
-Claro…dijo Yoochun.
Camino con un aura negra hacia la oficina del médico que estaba de los cuidado de Changmin golpeo la puerta y no espero el adelante y se adentro a la oficina.
-Oh señor Jung…-dijo el doctor asombrado por la visita.
-Donde tienes a Changmin…
-Lo siento mucho señor Jung pero el cuerpo del Joven Shim no esta acá.
-que hiciste con el maldito. Dime…-decía Ji Hoo totalmente enfurecido.
-Tranquilices señor Jung, ya le dije su cuerpo no está….
-Maldito infeliz se que estas mintiendo, te vi conversando con los hombre de Joe, me dices ahora mismo donde está o te las veras conmigo maldito…- decía Ji Hoon con llamas en sus ojos.
-El no te lo dirá…- una voz a su espalda se escucho y Ji Hoon se dio la vuelta para ver como uno de sus más fieles guardaespalda entraba con una sonrisa.
-Tú que mierda haces acá, deberías estar vigilando la habitación de Jaejoong.
-Doctor puede irse, ah por cierto…- dijo Honki antes de que saliera el doctor de la oficina..-Pasa a retirar tu paga y lárgate de aquí, El jefe no quiere ver de tu sombre en esta país, ahora fuera.
Ji Hoon no podía creer lo que sus ojos veian y sus oídos escuchaban, miro con odio a Honki, era él, el traidor de la familia,
-Asi que era tú, el maldito perro guardián de Joe…
-Lo soy, Ji Hoon…- dijo Honki con una sonrisa de superioridad…- y bueno ahora que lo sabes no me queda otra más que matarte, como lo hice con ese imbécil de Changmin…-dijo este sacando una Ruger's y para apuntar a la dirección de Hoon.
Pero para la sorpresa de Honki, no había temor en los ojos de Hoon, si no mas bien vio como una sonrisa aparecía en sus labios, para después hablar.
-Matarme…-dijo este con una sonrisa siniestra…- creo que te equivocas, el que morirá será otro.
Termino esa frase, y un disparo justo en el pecho de Honki, la sangre mancho el fino traje del guaraespalda y lentamente perdió la conciencia cayendo al suelo.
-Gracias hijo, llegaste justo en el momento indicado…
-No lo agradezcas, no iba dejar que mueras frente a mis ojos padre…- decía Yunho con la pistola en la mano, mirando el cuerpo de Honki ensangrentado.
-vete yo me encargare de este maldito, no quiero que carguen contra ti.
-Bien…- Ah padre si ves a Jae dale mis condolencias, decía este para desaparecer.
-No creo que sea necesario, lo encontrare cueste lo que cueste.
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Habían pasado tres meses de la muerte de su amado, lo extrañaba con todo su ser y no podía creer.
Que la vida podía terminar en unos segundos, que la vida es polvo y puede esparcirse en un momento.
Sentía la necesidad de devolver el tiempo para verlo de nuevo, abrazarlo y nunca soltarlo.
Quería verlo y reclamarle el porqué lo había abandonado, pensaba en que si tuviera solo un día mas, le diría cuanto lo ama, cuanto le extrañaba y necesitaba de su calor, todo eso desde que se fue.
Por su mente pasaban bellos momentos que vivieron juntos, su corazón se hacía cada vez más pequeño. Seguía pensando en cada detalle que a veces le parecía no importante, pero realmente cada una de ellos se iba quedando grabada en su corazón. Sentía que ya no era capaz de seguir a delante sin el, que su vida se estaba yendo de apoco. Miraba el cielo estrellado que le regalaba el esa noche.
-Escucha donde quieres que estés mirándome, no te perdonare por haberme dejado, por haberte ido, por hacer que me sienta así. Te odio imbécil, te odio me escuchaste bien, te odio…- decía este sin quitar la vista del cielo.
-Jae...
-Chun…-dijo este sorprendido al ver a su amigo en la puerta de su cuarto.
-Jae amigo, tienes que saber salir adelante, tu eres fuerte se que Changmin no le gustaría que estuvieras así…-decia Yoochun con sus ojos tristes.
-Tu no entiendo lo que yo estoy sintiendo, Parece que fue ayer cuando vi su rostro.
-No, no lo se pero se que es perder a una persona que quieres, porque lo estoy sintiendo contigo.
…-Jaejoong levanto su rostro y miro a su amigo a los ojos.
-Chun tengo miedo…- decía tapando su rostro con sus manos dejando caer sus lagrimas…-tengo miedo de no poder soportar este dolor.
-Lo sé, pero nos tienes a nosotros Jae tus amigo, tu tío y mucha gente más que te ama en esta casa, por favor hazlo por nosotros sal a adelante tienes que volver a brillar con esa luz tan pura y genuina tuya…- Yoochun lo abrazo con fuerza y no aguanto más y dejo caer todo ese dolor que a aguanto esos tres mes, sabía que no se comparaba con el dolor de su amigo, pero en ese momento necesitaba demostrarle que también le dolía ver como el se destruía.
-Jae…- dijo este alejando su cuerpo para mirarlo a los ojos…- promete que te esforzaras y saldrás adelante, prométeme que siempre tendremos tiempo el uno para el otro aun cuando tengamos muchas otras cosas que hacer... yo siempre estaré contigo en las buenas y en las malas...Vamos siempre a compartir nuestras risas, lagrimas y emociones.
Me lo prometes Kim Jaejoong…- dijo por ultimo Yoochun mirando seriamente a su amigo.
-Te lo promete Chun…- dijo este al ver con determinación la mirada de su amigo, no se había dando cuenta que no solo él estaba sufriendo, si no también todos las personas importante para el, y no quería eso, era lo último que deseaba, sabía que no iba ser fácil pero lo lograría
Y No volvería a caer otra vez,
1 año y 6 Meses después.
-Bien Jae hoy es tu cumpleaños número 23, así que no quiero escuchar una negativa y ahora mismo te viene con nosotros celebrar… -decía Yoochun.
-No tengo tiempo Chun, tú sabes que tengo cosas importantes con la empresa.
-Pero si hoy viernes mañana no trabajas.
-Ya, Jae vamos solo será unas horas, hace mucho que no te das el tiempo de salir con tus amigos… decía Junsu con entusiasmo
-Dijo que no… decía Jaejoong con el ceño frunciendo.
-Pero que mierda te pasa, donde quedo mi amigo, alegre, despreocupado, la persona que siempre me decía que fueranos a tomar unas copas… decía Yoochun con enojo
- Chun Sigo siendo el mismo solo que he madurado.
-Pues hablas como un viejo.
Jaejoong miro las caras de sus amigos y sintió pena, no le gustaba verlos molesto y menos si era por su culpa, tenían toda la razón hace mucho tiempo que no salía y menos con sus amigos, rodo los ojos y boto el aire de sus pulmones para darse por vencido, solo por esa noche, después de todo hace mucho tiempo no lo pasaba bien y hoy también era su cumpleaños no deseaba pasarlo solo.
-Ya está bien, vamos…- dijo Jaejoong para ver como cambiaban los rostros de sus amigos.
-Genial… -grito Junsu
-Gracias te aseguro que lo pasaremos bien amigo.
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Solo fueron en un carro y ese le pertenecía a Junsu, ya que era el único que no bebía alcohol podían estar tranquilo que hubiera alguien que si podría manejar lucido, porque de seguro que ni Jaejoong y Yoochun lo estarían.
Llegaron a uno de los locales más conocido de la cuidad, el ambiente estaba muy tranquilo, la música sonada de fondo, se fueron a la parte vip del local y pidieron de todo los tipos de tragos con y sin alcohol.
Conversaron por horas, Jaejoong se sentía feliz después de todo no había sido mala idea haber salido de su aburrida rutina, se dio cuenta de lo mucho que extrañaba hablar con sus amigos y hablar de otras cosas que no solo fuera trabajos.
El local estaba totalmente lleno, algunos bailando y otros simplemente conversando y devorándose las bocas.
-mmmm Jae, ese chico del fondo no te ha sacado la mirada desde que llegamos.
-He!!! …- Jaejoong afino su vista para mirar al chico que decía su amigo, sus miradas se cruzaron aunque no podía distinguir bien su rostro ya que estaban a metros de distancia y las luces del local no ayudaban mucho.
-Porque no te acercas deberías empezar a divertirte…- dijo su amigo con una mirada coqueta.
-Divertirme…- se dijo así mismo, hace más de un año que no salía con nadie y de seguro estaba en periodo de abstinencia…-No gracias aquí estoy bien…-dijo para mirar de reojo al chico.
-Bien como quieras…
Tomaron unas cuantas copas más y el alcohol empezó hacer efecto en los dos, claro está más en Yoochun ya que le entraba el amor pasional por su novio, tanto así que podía llegar a ser descarado.
-Baby te amo, eres tan bonito…- decía Yoochun borracho tomando a su novio para darle un beso y tocando su trasero con demencia.
-Hey! Ya empezaron con sus momentos de amor… decía Jaejoong con el ceño frunciendo
- Es que Junsu es irresistible… decía este pasando su lengua por su labios.
-No tienes remedio Chun, iré afuera, no tarden mucho…-replico Jaejoong levantándose para salir.
Cuando salió del bar, y siento el aire fresco chocar en su rostro noto que en verdad el alcohol le había pasado la cuenta, hace mucho que no bebía y ahora se sentía algo mareado y cansado.
Camino hasta el estacionamiento donde estaba el carro de Junsu. Se apoyo en él y trato de respirar profundo y regular su respiración ya que sentía que pronto devolvería la comida de hoy.
Miro su celular y marcaban las cuatro de la madrugada, suspiro al ver que sus amigos iban a tardar un poco, y todo por culpa de Yoochun, que cuando tomaba alcohol, le subía la temperatura y con Junsu al lado era imposible no hacer cosas.
Se alejo del estacionamiento y saco un cigarrillo camino hasta llegar a un pequeño parque, bastante iluminado y en total soledad, aunque dudo unos segundo si quedarse o no ahí, uno por la hora y otro porque podría venir cualquier persona y hacerle daño y más ahora que no aceptaba que le colocara más guardaespalda.
Opto por quedarse solo unos minutos, se sentó en uno de los asientos del parque y miro esa pileta de colores, la observo por un largo rato y de pronto sintió una corriente de aire que le calo los huesos, abraso su propio cuerpo y miro el cielo estrellado.
-Esto es tan extraño, ha pasado más de un año y aun te recuerdo...- decía este mirando el cielo con una sonrisa ….-No hay nada más difícil que despertar cada mañana recordando que no te he dejado de amar aunque has muerto, que te has ido para siempre. No se cómo enfrentar esta soledad, no se qué pasará con mi vida, pues nunca espere que de la noche a la mañana te fueras dejándome solo. Ya no soy el mismo chico, mi vida a cambiado drásticamente pero lo que jamás cambiara es que te sigo amando Minnie como el primer día que vi tus ojos.
el sonido de su móvil interrumpió el momento mágico que estaba viviendo, frunció el ceño y lo saco de su bolsillo y vio en la pantalla el nombre de Yoochun. Contesto la llamada y los gritos de su amigo no se hicieron esperar.
-Oye donde estas, te dije que nos esperaras.
-Solo estoy en el parque frente al estacionamiento.
-Idiota que haces solo ahí, acaso no sabes que es peligros, quédate ahí vamos a buscarte.
-No hace falta yo iré.
La llamada finalizo, se levanto mirando una vez más al cielo para hablarle
-Jamás podría odiarte, en mi corazón no hay odio y menos para ti mi amor.
Camino de vuelta al estacionamiento y miro una vez más su móvil que ya marcaban las cuatro y treinta de la madrugada, había pasado muy rápido el tiempo, levanto su vista y a lo lejos vio a una persona que caminaba en dirección contraria a él. Vestía entero de negro y por un momento se asusto al pensar que podría ser una maleante que quería atacarlo, trato de tranquilizar su corazón y camino seguro, poco a poco la persona misteriosa estaba a metros de el, Jaejoong no le quitaba la vista y de vez en cuando miraba por los alrededores por si es que era una emboscada, pudo notar que era un chico a pesar que estaba cubierto por un abrigo, distinguió la figura esbelta de el.
Cuando estuvo a solo metros sus miradas de cruzaron, no podía ver su rostro pero si sus ojos, y eso hizo que su corazón se acelerara, esa mirada era tan idéntica a... Changmin..
El chico paso por su lado y Jaejoong se dio la vuelta para mirar al chico y le hablo con determinación.
-Hey...
El chico se detuvo sin volteare a mirarlo.
-eemm, tu, disc...- no sabia porque estaba tan nervioso, pero nada coherente se le ocurría...- la hora me puedes decir que hora es...
El chico de abrigo se dio la media vuelta mostrando su perfil perfecto... y el corazón de Jaejoong latió a una velocidad incontrolable.
pero nada salio de los labios del chico solo lo miro de reojo y se dio la vuelta para deja a Jaejoong parado.
Jaejoong se quedo parado, pensando en lo estúpido que había sido, como podía pensar en algo tan absurdo que esa persona podía ser su Minnie.
Suspiro y dio un paso, pero antes de que pudiera dar el segundo paso, escucho su voz...
-Cuatro treinta Jae...
Este lo paralizo, su cuerpo no se movía. no podía ser cierto no, seguro su mente le estaba jugando una mala pasada, cuando giro su cuerpo vio la espalda del chico alto, que desaparecía en la espesa neblina que en ese momento estaba bajando.
-Esto no, no puede.. es mentira… Cha..Min..Minnie… dijo por fin sacando la voz siento desfallecer, liberando esas lagrimas que hace mucho tiempo no dejaba salir.
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