El viaje que nos dió la oportunidad de dar el primer paso 5 Final

Lamento la tardanza problemas, problemas y mas  problemas pero ya estamos mejor :D espero les guste el final de este Fanfic! porque dentro de la semana comenzare a subir uno nuevo para las amantes del YooMin! Si! por fin subire un YooMin jajajaj

-¿Qué ocurre?- preguntó el menor dejando por un momento de besar sus dedos. –Yunho... ¿Estás bien?- Jung asintió en respuesta, jadeando suavemente a medida que las caricias aumentaban. 

Changmin sonrió; Yunho tenía la misma expresión que aquella vez en los baños de la empresa... aquella vez que le acarició hasta llevarlo a acabar en su mano... solo que esta vez, el cuerpo de Yunho ya estaba totalmente desarrollado. Simplemente quiso hacerle sentir más; ver más de aquellas expresiones que se dibujaban en el rostro de su mejor amigo. 

Un nuevo gemido escapó de sus labios cuando sintió nuevamente sus dedos en el interior de la boca de Min. Simplemente le costaba mantener los ojos abiertos... aquella vez, tampoco los abrió; si no que los mantuvo cerrados hasta que se sintió acabar por primera vez entre los dedos del Menor. Finalmente, se obligó a abrirlos cuando dejó de sentir la lengua de Changminnie recorrer sus dedos. 

El moreno besó suavemente los labios de Yunho; este parecía algo confundido, aturdido más bien... aquello le hizo sonreír, sentir a Jung más especial que nunca. Así que, sin dejar de besarle, se colocó sobre él... sentándose en la parte baja de su vientre. 

Un gemido escapó de ambos cuando sus cuerpos se rozaron de aquella forma tan íntima. Por un momento se quedaron así; sintiéndose, disfrutando de aquella placentera sensación... hasta que Changmin alzó un poco sus caderas y guio la mano de su mejor amigo a que tocara aquella parte de su cuerpo.

-¿Estas... seguro?- preguntó Yunho al sentir sus dedos demasiado cerca de aquel lugar que suponía debía preparar. 

-Claro... si no soy yo, eres tu ¿no?- sonrió con cierto nerviosismo. –Y quiero que lo hagas tu... así que... puedes... hacerlo Yunnie...- jadeó suavemente y se mordió los labios cuando sintió las suaves caricias sobre su entrada. 

Jung le miró, entendiendo perfectamente lo que su amigo quería decir... y por un momento, se sintió aliviado del rol que Minnie le había ofrecido. Asintió con un poco de seguridad, y seguidamente, lo hizo despacio... sin dejar de mirar al menor; tan solo acariciando aquella zona con sus dedos humedecidos... hasta que se decidió a presionar un poco con uno de ellos, colándolo en un segundo intento. Entonces sintió al menor temblar, estremecerse sobre su cuerpo de tal forma, que solo pudo quedarse embobado mirándole. 

Incomodo... así era como se sentía una vez que aquel dedo entró en su cuerpo. Aun así, trató de relajarse, de facilitarle el trabajo a Yunho.... así que atrapó los labios de este entre los suyos, comenzando a besarle con calma entre suaves jadeos que escapaban de su boca a medida que Jung le iba preparando; a medida que aquella incomoda sensación, se trasformaba en algo placentero… en algo completamente nuevo seguramente para ambos. 

Yunho recibió los besos de su amigo respondiendo a ellos, volviéndolos algo apasionados, necesitados. Había sido demasiado tiempo guardando aquel sentimiento que tenía por Minnie; desde que era un Niño... y en ese momento, Changminnie estaba entregándose a él por completo. 

Se miraron; sus labios tuvieron que separarse a consecuencia de la respiración agitada. Una sonrisa cómplice por parte de ambos, un nuevo sonrojo, y más besos... 

Min gimió suavemente; un gemido claramente de placer... ya no se sentía tan incómoda aquella sensación, y los dedos de Jung se movían con cierta soltura dentro de su cuerpo provocándole más gemidos. Por su parte, el mayor siguió explorando con sus dedos, preparándole, sintiéndole prácticamente listo. Aun así, dudó en hacer lo siguiente... hasta que Changmin le habló al oído... 

-Hazlo ahora.- le pidió en un susurro, ofreciéndole una suave sonrisa. -estoy preparado....- sentía su corazón latir a mil por hora; impaciente y algo temeroso. –…o eso creo...- soltó una risita; suave, nerviosa... la cual compartió con su mejor amigo.

-Si...- Yunho sacó despacio sus dedos, mirándole. –Voy a hacerlo.- le dijo con seguridad, recibiendo un asentimiento por parte del menor. 

Sus ojos se cerraron con fuerza, y sus manos, se aferraron a las sabanas justo a cada lado de la cabeza de Yunho cuando este comenzó a entrar en él. Relajado, así era como debía estar... ¡pero era totalmente imposible! Su propio cuerpo se contraía de manera involuntaria sin dejar que Jung entrara sin sentir dolor. 

El mayor se detuvo un momento. Ya lo sabía; Changmin estaba tenso pero aun así parecía hacer lo posible por relajarse. Tanta presión no le dejaría entrar, ¡acabaría lastimándole si no se relajaba! Así que simplemente, acarició la mejilla del menor con sus dedos, atrapándole los labios entre los suyos, distrayéndole. 

Minnie suspiró en aquel beso… y cuando la mano de Yunho bajó por todo su torso hasta rozar su miembro, gimió en un suave quejidito; buscando un poco más de aquellas caricias por parte de su amigo.

Por un momento, Yunho rompió el beso para mirarle; lo entendía... lo que Changminnie andaba pidiéndole... así que, se atrevió a pasar sus dedos sobre el miembro del menor; acariciándolo, estimulándolo hasta volver a despertarlo completamente. Poco a poco le fue acariciando, dándose cuenta de que aquellas caricias conseguían llenar de placer a su mejor amigo... y no solo eso, si no que conseguían relajarle. 

No podía evitarlo, era imposible no gemir… ignorar las caricias de Yunho que se sentían deliciosas sobre su miembro; lentas, suaves... pero realmente estimulantes. En ese momento, se sintió un poco más relajado... al menos su cuerpo ya no estaba tan tenso, pero si agitado y deseoso por sentir más placer. 

-Yunnie... aah...- movió un poco sus caderas, bajándolas... a la vez que Jung buscó alzar las suyas. 

-¡Aaaah!- un gemido ahogado por parte del más joven... ya casi estaba dentro; podía sentir aquel intenso calor. 

Suavemente, Minnie se comenzó a mover; sintiendo como Jung comenzaba a acariciar su interior, así como la mano de este daba otras tantas caricias sobre su miembro, haciéndole estremecer de placer. 

Yunho le miró; no podía dejar de hacerlo... la expresión de Changminnie le estaba pareciendo lo mejor que había visto en toda su vida, y simplemente quería seguir observándolo. El único “problema”, era que con cada movimiento se sentía entrar más en él, embriagándose por completo del calor que desprendía aquel cuerpo sobre el suyo... y como consecuencia, su vista comenzaba a nublarse por el placer obligándole a cerrar los ojos. 

Caricias, besos, miradas... calor... aquel paso que ambos habían dado, se había convertido en algo imposible de retornar. Los gemidos hacía rato que inundaban aquella habitación de hotel… suaves, necesitados... así como ambos cuerpos se movían, compenetrándose entre las sabanas de aquella cama que habían compartido noches atrás; la que ahora compartían de una forma totalmente diferente.

Yunho alzó sus brazos hasta tocar con sus manos la espalda de Changmin, acariciando la piel de su amigo, sintiéndola húmeda por el sudor... y en un abrazo necesitado, le hizo quedar pegado a su pecho. Quería abrazarle, acortar la distancia entre ambos, sentirle... incluso había dejado de masturbarle para rodear el cuerpo del moreno con sus brazos. Por un momento pensó que quizás Changmin prefería seguir siendo acariciando de aquella forma, pero en ese momento, Min quería besarle; hacerle sentir más cercano a él. 

Por su parte, el mayor de ambos respondió a los besos del más joven; con ansias, con ternura, con un montón de sentimientos que andaba encontrando al hacer el amor con su mejor amigo. Jung había dejado de acariciarle de “aquella” manera... aun así, sintió una presión, un roce casi perfecto, cuando su miembro quedó aprisionado entre los vientres de ambos. 

El menor alzó su mirada para encontrarse con los ojos de Jung, y este le respondió con una sonrisa que le tembló en los labios cuando un gemido un poco más fuerte escapó de su boca. En respuesta, una nueva sonrisa por parte de Changminnie... quien enterró su rostro en el cuello de su amigo pare besarle, para hacerle oír su voz más pegada a su oído. El abrazo entre ambos se había vuelto más estrecho, y para Minnie, el hecho de saber a Yunho abrazándole contra su pecho con aquella firmeza, le hizo sentir aún más especial. 

-Yunho...- el nombre de su amigo se dejó oír entre su respiración agitada. -me gustas Yunnie...- volvió a declararse, a confesarle sus sentimientos con una sonrisa. 

El mayor solo sonrió en respuesta, se sentía incapaz de hablar... así que sus manos recorrieron la espalda del menor diciéndole con caricias lo que su garganta no dejaba salir. 

Una nueva sonrisa por parte de Changmin ante la muda respuesta del otro... he inclinado hacia atrás la cabeza para que Yunho besara su cuello, gimió necesitado cuando los dientes del moreno rozaron su piel en un suave mordisco. Aquello provocó que se aferrase fuerte a su amigo, sintiéndolo más cercano que nunca, derritiéndose cuando las manos de Jung bajaron a sus caderas para guiarle sus propios movimientos... 

-Yunhooo~ no podré… ¡aaah! aguantar... más…- cerró los ojos con fuerza, prácticamente se sentía acabar. –Jung...- le llamó de nuevo, moviendo sus caderas para buscar rozarse un poco más con la piel bajo la suya, 

-Cállate...- le besó los labios, fastidiado porque Changmin no se callase ni en un momento como ese. 

Ya sabía lo que vendría... podía sentirlo en Minnie y en sí mismo... aquella sensación de placer; tan intensa y tan diferente al hacerlo con otra persona... Minnie, estaba siendo su primera vez, como si le hubiera estado esperando todo ese tiempo... después de todo, él era esa persona que todos buscan ser “especial”.

Realmente, para Changminnie también estaba siendo algo nuevo; algo totalmente distinto a estar con una mujer... y el simple hecho de estar enamorado de Jung desde hacía tanto tiempo, no le hizo dudar ni un solo segundo en entregarse a él. 

-Yunhoo~ te he dicho que... voy a...- tembló... todo su cuerpo se deshacía en esos leves temblores que se anticipaban al final.

-Ya lo sé... solo... solo hazlo....- su respiración se volvió aún más agitada, ante la cual, el menor sonrió sabiendo que Yunho también acabaría.

Más besos y caricias. Esta vez Changmin conseguía alzar un poco sus caderas mientras Yunho entraba profundo en él, intentando mantener un ritmo constante pero sin conseguirlo del todo. Aun así, ambos andaban sintiendo lo mismo; aquel escalofrío que dejaría un delicioso temblor placentero en sus cuerpos... 

Y así fue; no pasaron demasiados segundos más hasta que Changmin comenzó a derramarse entre los vientres de ambos; gimiendo sobre los labios de Yunnie y enredando sus dedos en el cabello oscuro del mayor... compartiendo así aquel orgasmo con su mejor amigo cuando este se estremeció bajo su cuerpo llenándole de él, temblando levemente ante aquella fuerte sacudida que nublaba todos sus sentidos. 

Un par de minutos en silencio; solo las respiraciones agitadas y los suaves jadeos que aún seguían... hasta que se miraron... besándose una vez más; sintiendo sus cuerpos bañados en sudor y aquel placer que aún les embriagaba.

-Eso ha sido...- susurró Changmin entre jadeos, sonriendo tontamente.

-Genial...- finalizó el mayor, cerrando los ojos y manteniendo aquella amplia sonrisa en sus labios.

Changminnie sonrió tímidamente, pasando su dedo índice sobre la mejilla de Yunho, haciéndole abrir los ojos.

-Yunnie- Shi...- susurró travieso, embobado con las mejillas rojas del más joven.

-¿Uhm? ¿Qué quieres?- le preguntó sabiendo que su amigo no callaría, recibiendo de nuevo aquella sonrisita casi infantil por parte de este. –- Minnie ¿qué quieres? No te hagas el tonto.- le regañó divertido, llevando sus dedos al rostro del menor para apartarle el cabello de la frente. 

-Es que... me gustas mucho...- volvió a confesárselo, consiguiendo que Jung apartase la mirada avergonzado, sonriendo suavemente ante ese gesto por parte del más joven. – Mmmh... ¿Vamos a la ducha?- 

-¿A la ducha?- Jung le miró confundido cuando Minnie cambió de tema tan drásticamente. 

-Si... a la ducha... a refrescarnos un poco y a... limpiarnos...- sonrió tímidamente, haciéndole ver a Yunho que ambos estaban sudando así como otros fluidos salpicaban sus cuerpos desnudos.

Un nuevo sonrojo por parte del mayor así como una suave risita nerviosa. Entendió el punto de Changmin, así que se movió un poco, saliendo de él bajo un suave gemido por parte de ambos. 

–Sí, vamos a la ducha....- sonrió, aun así, seguía abrazando a Min... 

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Tras unos 15 minutos, Yunho salió de la ducha secándose el cabello, tan solo llevando sus pantalones puestos... así como una amplia sonrisa se dibujó en sus labios al ver a Changmin esperándole en la cama.. 

-Pensé que ya te habrías dormido.- Jung dejó la toalla a un lado, metiéndose entre las sabanas junto a su amigo. –Después de todo hiciste trampas y te colaste en la ducha primero ¿no?- rió tontamente.

En ese momento, Jung era incapaz de actuar como una persona seria o algo así... más bien, se sentía como una adolescente que acaba de tener su primera vez con el chico más guapo del colegio. 

-Te estaba esperando.- Changmin le devolvió la sonrisa, abrazándolo y acomodándolo sobre su pecho. –mmm... hueles muy bien... Yunnie.- susurró respirando el aroma que el cabello de Jung desprendía.

-No me huelas así, ¡pareces un hentai! Y no me llames “Yunnie” de esa forma, parece que te burlases de mi...- el mayor trató de mostrarse ofendido, pero solo pudo soltar una risita, la cual Changmin respondió de la misma forma. –Si Jung... ¿y ahora qué?- preguntó un poco serio, dejándose caer por completo sobre el torso del menor.

-Pues... ¿a dormir?- la mirada de Yunho le hizo entender que no bromeaba. –no lo sé... supongo que... lo mantendremos en secreto.- suspiró y Jung quedó en silencio. –Yunho~ ¿cuando comencé a gustarte de esta forma?- preguntó divertido, intentando desviar el tema. 

-¿Desde cuándo?- el mayor sonrió, sintiendo como sus mejillas se ponían aún más rojas. –desde que vi a Minnie por primera vez... ahí pensé “¿qué pasa con este chico? ¿De qué va? Es un completo idiota…”- 

-¿De verdad pensaste eso? ¿Que era idiota?- 

-Bueno... algo así…- Jung no pudo hacer más que reír ante la puchero en los labios del menor. –También pensé que eras… una persona con la que me podría llevar bien.- aquello ya hizo sonreír a Changmin. 

-Entonces te perdono lo de idiota.- rió suavemente. –Pero… ¿desde hace tanto tiempo que te gusto?- Jung sonrió con cierta ternura hacia su amigo cuando este asintió. –entonces... aquella vez cuando te hice... “eso”... yo ya te gustaba ¿no?- Jung volvió a asentir en respuesta.

-Ese día... me excité al verte en los vestuarios...- miró de reojo a Changminnie, viendo la sonrisita boba que se había dibujado en los labios de este al decirle aquello. -¡Yo era muy joven! ¡Mi cuerpo reaccionaba solo! Por eso hui al baño...- acabó confesándole aquello, sonrojándose.

Ese era el momento para seguir confesando cosas, para aclarar lo que ocurrió entre ambos aquel día en que solo eran unos novatos... ese tema que no habían vuelto a tocar hasta su estancia en NY. Así que Min sonrió sutilmente.

-Y tu empezaste a gustarme justo ese día.- Jung le miró con sorpresa. -Cuando pude ver esa expresión placentera pero inocente en tu cara... ahí ya no quise detenerme.- le abrazó un poco más, sin querer soltarle... hacía mucho que deseaba tener a Jung de esa forma y por fin podía hacerlo. –esa vez, fue... la primera vez que tu...- miró su propia mano, recordando como entonces Jung se había derramado en ella.

-Si... lo fue...- el mayor rió un poco, avergonzado… y tras un corto silencio, siguió hablando. –Eres un hentai...- se giró a mirarle, poniendo una fingida mueca de enfado.

-Pero así te gusto.- ambos se miraron ante la respuesta del menor, acabando por reír tontamente. –Eso es que Jung es más hentai que...- no pudo acabar; Yunho le había callado con un beso. 

Sonrió; al parecer aquella seria la forma con la que el moreno evitaría que hablase más de la cuenta. Un beso que se volvió atrevido… dando así paso a nuevas caricias que duraron toda la noche. 

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A la mañana siguiente... 

>El avión con destino a Seúl- Corea, está a punto de efectuar su salida

-¡Changminnie date prisa o nos quedamos aquí!- le gritó mientras andaba a paso rápido por la terminal. 

-Yunho~ tengo mucho sueño no puedo correr más~- protestó el menor mientras intentaba seguir el paso del mayor.

-Es tu culpa, tú te empeñaste en seguir haciendo “eso” durante toda la noche, ¡así que ahora aguántate y corre!- 

-Si... Si...- miró a Yunho con un puchero, dándose toda la prisa que su cuerpo cansado y algo dolorido le permitía darse. 

Unos minutos más, y ambos consiguieron subir al avión, quedándose tranquilos cuando estuvieron sentados en sus respectivos lugares. 

-Menos mal, pensé que no lo conseguiríamos.- una sonrisa de satisfacción se dibujó en el rostro de Jung. –¿Changmin me estas oyendo?- le miró, pero en ese momento, el menor estaba en mitad de un largo bostezo. –Changmin no seas mal educado.- le dio un suave codazo en el costado, aguantando la risa. 

-Te he oído... y ya te lo he dicho~ tengo mucho sueño.- refunfuñó en un tono de voz infantil, acurrucándose junto a Jung usándole de almohada. 

-Sigue siendo tu culpa....- murmuró el mayor, volviendo la mirada a otro lado para ocultar su sonrojo de los ojos de Minnie. 

Min tan solo sonrió; Jung era un verdadero encanto... y aun lo era más cuando hacia lo posible por no mostrar lo que realmente sentía por él. 

-Yunho~- 

-¿Queeee...?- preguntó algo fastidiado, volviéndose a mirar a Changmin. 

-beso....- y alzándose un poquito, besó la mejilla del moreno, sonriendo al verle sonrojado una vez más. 

¡Aquello le había pillado por sorpresa! ¿Changminnie le había besado en la mejilla? ¿En el avión y delante de otras personas? ¡Aquello había sido bastante embarazoso! Tanto, que volvió a desviar la mirada. Aun así, se aclaró la voz para susurrar algo...

-Be... beso..- pronunció finalmente, acabando por sonreír cuando sintió a Minnie hacer lo mismo. 

Aquel viaje, ciertamente les había dado una oportunidad después de 8 años; la de dar aquel primer paso como algo más que amigos.